La historia también se escribe en Internet. Un 15 de enero del 1997, un reducido equipo de cuatro periodistas lanzaba al ciberespacio la primera versión oficial de El Comercio en Internet.
Eran los años del disquet, de la computadora con 64 MB de RAM, del módem telefónico de 56 kilobits por segundo, del navegador Netscape y de la lectura de páginas web estáticas. No existían blogs (o al menos no los conocíamos como tales) y las redes sociales apenas eran tímidas listas de interés.
Eran los años del disquet, de la computadora con 64 MB de RAM, del módem telefónico de 56 kilobits por segundo, del navegador Netscape y de la lectura de páginas web estáticas. No existían blogs (o al menos no los conocíamos como tales) y las redes sociales apenas eran tímidas listas de interés.
Ese día salimos a la Internet con un acontecimiento que un mes antes había conmovido al mundo luego que un grupo de terroristas del MRTA secuestrara a centenares de personas en el interior de la residencia de la Embajada de Japón.
El diseño de la página de aquel año era sumamente sencillo y plano. Las noticias del diario impreso compartían espacio con los primeros servicios de valor agregado, como los avances noticiosos, la cartelera de cine, la base de datos de Infobanco y la información que ofrecían otras publicaciones digitales del Grupo de Diarios América. Era, como se dice hoy, la era del periodismo 1.0, aquel donde los contenidos del papel se trasladaban manualmente a la versión digital sin mayores componentes de valor agregado.
El lanzamiento de la web de El Comercio concitó de inmediato la atención de los cibernautas. En el primer día del lanzamiento se reportaron 77 mil páginas vistas en el sitio.
"No se imaginan el tiempo que estamos esperando acá en Australia para poder tener noticias en tiempo real acerca del Perú", expresó por su parte Robert Portocarrero, peruano residente en Sidney.
El arquitecto peruano Ronald Villasante escribió desde Egipto haciendo llegar sus saludos por "la remozada presencia de "El Comercio" en Internet.
El flujo informativo del sitio cambió radicalmente tres meses después. El 22 de abril de 1997, un comando de las FF.AA. rescató a los rehenes del interior de la sede diplomática. La acción fue reproducida minutos después en la portada de El Comercio junto con una fotografía de la agencia Reuters. Este cambio sorpresivo de la portada -que por aquellos años trataba de ser una versión espejo del Diario- dio la vuelta al mundo y quedó registrado en el libro “Explorando el Ciberperiodismo Iberoamericano”.
“Recuerdo la lección brindada por el diario El Comercio de Lima cuando en 1997, poco después de resolverse la liberación de los rehenes tras 126 días de ocupación por parte del MRTA, en el sitio web se publicó la foto que al día siguiente fue tapa de la mayoría de los diarios del mundo. Internet había superado en aquella oportunidad, la clásica velocidad de las agencias de noticias y, además, alertaba a los sitios web que se identificaban como referentes en información para que se esmeraran en agudizar su ingenio y mejorar sus reflejos”, escribió Walter Napoli, editor por aquellos de la versión digital de La Nación de Argentina.
Desde ese momento El Comercio se mantiene a la vanguardia en la apuesta informativa en Internet. Migró de forma muy rápida al Periodismo 2.0 (en el que se aportan noticias en tiempo real junto con otros servicios) y evolucionó con sus noticias y diseño hacia el escenario de la multimedia, los espacios interactivos y las redes sociales, así como hacia la nueva corriente del periodismo ciudadano. Vivimos la era del Periodismo 3.0 y estamos seguros que la innovación continuará. No sabemos si llegaremos al periodismo, pero de lo que puedo estar seguro es que en los próximos meses el periodismo será más dinámico de lo que es ahora. Hay muchos retos por delante y solo los que entiendan el nuevo medio podrán sobrevivir al desafío de trabajar en un medio donde todos podemos comunicar algo.
